Ya era Lunes, me desperté y me sentía peor que la noche anterior... Al mediodía volví a mi dpto de aquel entonces, para cambiarme e irme a trabajar. Pero unas cuantas lineas de fiebre me obligaron a irme directamente al médico.
Sola me fui hasta la guardia del Sanatorio Allende, me vio un médico que me dijo que mis síntomas eran propios de un fuerte resfrío... finalizando la consulta mientras me indicaba que remedios tomar me vi obligada a contarle de lo que venia pasándome. "Tengo un atraso de varios días, me hice un test que me dio negativo pero aún así tengo dudas de estar embarazada..." le dije. A lo que el me respondió que no podía medicarme sin confirmar antes esto, me hizo un pedido de análisis de sangre y me dijo que vuelva apenas tenga los resultados.
En ese mismo momento me fui al laboratorio, me hicieron la extracción..."En dos horas tenes los resultados" dijo la secretaria. Y esas fueron las dos horas mas eternas de mi vida... Por supuesto le avise a tu papá (que ese día salia de trabajar a las 18 hs, y el resultado estaría a las 19 hs), así que apenas salio, allá fue a hacerme compañía.
Llegó la hora, retiramos en un sobre celeste los resultados, lo abrimos y solo habían números y letras que no comprendíamos... Jere me dijo que lo dejara ver, que el quizás entendía que quería decir todo eso, primero me dijo que creía que era un SI, y después que creía que era un NO... A todo esto llegamos a la puerta del consultorio del medico que me había visto unas horas atrás, golpee su puerta, me abrió, entre y me senté en frente de el (Jere se quedo en la puerta, la cual quedo abierta por detrás del doctor). El medico abrió el sobre y dijo "POSITIVO NO MAS..." y yo solo asentía con la cabeza sin decir una palabra, acto seguido a esto, me hizo la receta con los pocos remedios que podía darme para calmar mi resfrío... Me la entregó, y nos fuimos.
Recuerdo que salimos caminando sin rumbo fijo, yo con el sobre celeste en mi mano no emitía una palabra... hasta que tu papá dijo "No me vas a decir nada?" a lo que respondí con un conciso "Que queres que te diga?..." Y seguimos caminando sin decir más... nos tomamos un taxi (que se quedo sin gas a mitad de camino, y estando recién por la terminal nos bajo, y tuvimos que buscar otro...).
Llegamos a la casa de papá, y preparamos todo para que yo empezara a hacer el reposo que el medico me había indicado por unos días. No se habló más del tema.
Pasaron los días, la fiebre no bajaba... y un simple resfrío se convirtió en una gripe que duro semana y media... Tiempo en el cual sin terminar de caer en la realidad yo solo atinaba a llorar envuelta en mil preguntas, dudas y nervios.
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